Por: Javier A. Bances Febres.

Cuando el sentimiento de animadversión es producto de resentimiento procaz por falta de argumentación suficiente y probadamente válida, cualquier pacato disfrazado de pendolista, lanza acusaciones a diestra y siniestra con el único fin de confundir a los demás en un afán de aparecer como fiscalizador o salvador de supuestos entuertos.
No queremos ser contestatarios de alguno de estos ramplones que, con el único deseo de fustigar la opinión pública, muchas veces desinformada del accionar municipal, escriben críticas injustas en su innoble propósito de manchar a quien odian personalmente.
Pero, dejando de lado las baladronadas de estos enanos mentales, debemos dejar sentado que en Paita, una de las obras mas esperadas por la población ha sido el mejoramiento del Mercado de Abastos en el que, el actual gobierno que encabeza Alejandro Torres Vega, ha puesto bastante énfasis a fin de entregarlo, conforme se proyectó, antes de fin de año a la población y, en especial a los comerciantes que en mayoría dieron su total respaldo a la obra.
Esta es una de las que, durante varios años, a pesar de las promesas electorales de anteriores alcaldes, no se concretó, debiendo por tanto el actual Concejo Provincial aprobar una inversión de casi dos millones de soles para su ejecución, la que –a pesar de la oposición recalcitrante de algunos codiciosos e insatisfechos comerciantes que pretendieron frenarla- salió adelante encontrándose actualmente en un avance de 97 por ciento si se exceptúa a los últimos dinosaurios del atraso urbano que siguen empecinados en no salir de la vía pública donde sentaron sus tiendas hace años porque, en su obtuso entender,les ampara un derecho del año de las calendas griegas.
Paita es, en estos tiempos, una ciudad capital con un futuro bastante promisorio, con proyectos de gran envergadura que han empezado a configurarse como una próxima realidad. Por tanto está siendo preparada para recibir a diversas corrientes de inversionistas tanto nacionales como extranjeros atraídos por la oferta no solamente de sus productos como los hidrobiológicos, los gasíferos y mineros, sino por los agroindustriales como la futura producción de etanol con la siembra de miles de hectáreas de la caña de azúcar en el valle del Bajo Chira, hasta donde llega la provincia en sus límites jurisdiccionales. A ello se suma, indudablemente, la oferta turística como la constituyen sus hermosas playas veraniegas desde “El Audaz”, “Las Gaviotas”, ”Te para Dos”, “Los Cangrejos” y otras mas al sur que están dentro del plan de desarrollo provincial. Todo esto ha sido activado por el actual gobierno municipal y, hay que hacerle entender a quien funge de analista político, que problemas de índole judicial-policial como asaltos de bandas, latrocinios sistemáticos deben ser resueltos por los estamentos respectivos. En consecuencia lo que este escribiente hace es simplemente reclamar en puerta ajena.
Es lamentable, sinceramente, que la mediocridad trate de asumir roles fiscalizadores sin asidero técnico y legal alguno, tan solamente por aparentar un interés que no sacó a relucir cuando era favorecido por las anteriores autoridades de turno. En realidad hay que ser muy caradura para aparecer como crítico de marras en la esperanza de lograr un puesto en un futuro gobierno.
De lo que si estamos seguros es que –como decía el Quijote a Sancho- cuando los canes ladran, es prueba de que avanzamos para amargura de los enemigos gratuitos de la actual gestión edilicia municipal paiteña.

JAVIER A. BANCES FEBRES.
DNI: 02608042
Paita, Diciembre 2008..

(NOTA DEL EDITOR: En pro de la diversidad de opiniones, este blog cumple con publicar INTEGRAMENTE este artículo del señor Bances, responsable de Imagen de la municipalidad de Paita. No nos solidarizamos con su contenido, pero lo insertamos en nuestra edición por considerar que la opinión pública paiteña merece leer a todas las partes, a fin de formarse un concepto claro sobre la problemática de Paita y sus distritos.)